Qué pasa cuando tu doctor te dice: "Estas devastada, tienes que comenzar a cuidarte, cómo es posible que estés en estas condiciones"...?
Lo primero, es la sensación de querer salir corriendo, llegar a mi casa, ponerme en posición fetal y llorar como un bebe.
Lo segundo, es olvidar todo lo anterior y recordar que soy una mujer grande que puede superar todos los desafíos que se pongan por delante.
Y tercero agachar el moño, recibir la dieta que te da el doctor y decir casi sin animo, " De acuerdo, la seguiré al pie de la letra"... Pero, que pasa con esa cena rica que tenias para el Viernes, o el carrete que estaba preparado para el Sábado?...
En esta situación o llamo para cancelar todos los panoramas y me preparo para un fin de semana pro-lechuga o, me hago la lesa y comienzo el próximo Lunes... Oh wait!!! el Lunes era la junta golosa con las chicas de la pega.
En fin, así se pasan los días y no comienzas nunca, hasta que se te ocurre ir al closet y probarte esos jeans que no te pones hace unos meses... ¿Y que es lo que pasa? Muerta en dolor te das cuenta que tienes que hacer dieta, así que sacas las hojas del fondo del cajón de tu escritorio y partes al supermercado a comprar, el pan integral, leche descremada, queso blanco, jamón de pavo, y un montón de cachureos más, que son lo único que puedes comer durante 1 mes y te dispones a hacerla... 2 semanas después ya no puedes ver el jamon de pavo, el pan integral te aburre y la leche se puso agria en tu refrigerador jajajajaja... y así comienza el cambio en la minuta y al final terminas comiendo las mismas porquerías de hace un mes atrás, y si lograste bajar algo en estas dos semanas... sorry pero las subiste otra vez.
Bueno, esta vez si va a resultar, así que deseenme suerte, por una semana pro-alimentos saludables... =)
